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Tras una larga controversia

Elon Musk tomó el control de Twitter y despidió a altos ejecutivos: "El pájaro ha sido liberado", escribió en la red

Los cambios se produjeron pocas horas antes de la fecha límite establecida por un juez de Delaware para finalizar el trato.

Elon Musk tomó el control de Twitter y destituyó al director ejecutivo, al director financiero y al principal abogado de la compañía, dijeron el jueves por la noche dos personas familiarizadas con el acuerdo.

La gente no dijo si todo el papeleo para el trato, originalmente valorado en 44 mil millones de dólares, se había firmado o si el trato se había cerrado. Pero dijeron que Musk está a cargo de la plataforma de redes sociales y despidió al director ejecutivo Parag Agrawal, al director financiero Ned Segal y al asesor legal jefe Vijaya Gadde. Ninguna de las personas quiso ser identificada debido a la naturaleza delicada del trato.

Unas horas más tarde, Musk tuiteó: “El pájaro ha sido liberado”, en referencia al logotipo de Twitter. Las salidas se produjeron pocas horas antes de la fecha límite establecida por un juez de Delaware para finalizar el trato el viernes. Amenazó con programar un juicio si no se llegaba a un acuerdo.

Aunque llegaron rápidamente, los principales movimientos de personal se esperaban ampliamente y casi con seguridad son los primeros de muchos cambios importantes que hará el CEO de Tesla.

Musk se enfrentó en privado con Agrawal en abril, inmediatamente antes de decidir hacer una oferta por la compañía, según mensajes de texto revelados más tarde en documentos judiciales. Los cambios de Musk tendrán como objetivo aumentar la base de suscriptores y los ingresos de Twitter.

En su primer gran movimiento el jueves, Musk trató de calmar a los desconfiados anunciantes de Twitter diciendo que está comprando la plataforma para ayudar a la humanidad y no quiere que se convierta en un “infierno de todos contra todos”.

“La razón por la que adquirí Twitter es porque es importante para el futuro de la civilización tener una plaza pública digital común, donde se pueda debatir una amplia gama de creencias de una manera saludable, sin recurrir a la violencia”, escribió Musk en un inusualmente largo mensaje para el director general de Tesla, que suele proyectar sus pensamientos en tuits de una sola línea.

Continuó: “Actualmente existe un gran peligro de que las redes sociales se dividan en cámaras de eco de extrema derecha y extrema izquierda que generan más odio y dividen a nuestra sociedad”.

Musk ha expresado previamente su disgusto por la publicidad y la dependencia de Twitter de ella, lo que sugiere un mayor énfasis en otros modelos comerciales, como las suscripciones pagas, que no permitirán que las grandes corporaciones dicten políticas sobre cómo funcionan las redes sociales. Pero el jueves aseguró a los anunciantes que quiere que Twitter sea “la plataforma publicitaria más respetada del mundo”.

Musk dijo que Twitter debería ser “cálido y acogedor para todos” y permitir a los usuarios elegir la experiencia que quieren tener.

Se espera que Musk hable directamente con los empleados de Twitter el viernes si se finaliza el acuerdo, según un memorando interno citado en varios medios de comunicación. A pesar de la confusión interna y la baja moral ligada a los temores de despidos o el desmantelamiento de la cultura y las operaciones de la empresa, los líderes de Twitter esta semana al menos dieron la bienvenida a la llegada y los mensajes de Musk.

La principal ejecutiva de ventas, Sarah Personette, directora de atención al cliente de la compañía, dijo que tuvo una “gran discusión” con Musk el miércoles y pareció respaldar su mensaje del jueves a los anunciantes.

“Nuestro compromiso continuo con la seguridad de la marca para los anunciantes permanece sin cambios”, tuiteó Personette el jueves. “¡Mirando hacia el futuro!”

El aparente entusiasmo de Musk por visitar la sede de Twitter esta semana contrastaba fuertemente con una de sus sugerencias anteriores: el edificio debería convertirse en un refugio para personas sin hogar porque muy pocos empleados realmente trabajaban allí.

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