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Tiene apenas 20 años y mucho fututo

De Cuba para el Mundo: Adriana Ortíz Meriño cuenta que sueña con ser una excelente modelo

Adriana Ortíz Meriño es de Cuba y sueña con convertirse en una excelente modelo, tiene apenas 20 años y un gran futuro por delante.
Adriana cuenta que estuvo estudiando en una agencia de modelo donde aprendió sobre pasarelas, maquillaje y actuación, entre otras cosas.
Con apenas 20 años, Adriana además está estudiando Literatura del Español y espera retomar su curso de Modelaje que tuvo que abandonar por motivos personales.
Adriana no pensó que iba quedar contratada luego de participar de un casting de modelos pero grande fue su sorpresa cuando le llegó el mensaje diciéndole que había sido elegida.

Adriana Ortíz Meriño tiene 20 años y es Cuba, dice que desde muy pequeña le apasiona el modelaje y que espera poder convertirse una excelente profesional en el rubro. En esta nota con NOVA, la conoceremos un poco más en profundidad.

Sobre los comienzos, Adriana cuenta: “Desde chica me ha apasionado el mundo del arte y el modelaje, y nunca pensé que se me daría la oportunidad de vivir esta linda experiencia, incluso el día menos esperado recibí una llamada de una amiga, y me comentó que había visto en redes sociales que se estaban realizando castings online para modelos”.

“Lo pensé por unos segundos porque creí que no quedaría dentro de las chicas aprobadas, y gracias a mi amiga y muy importante, mis padres que siempre me han apoyado, me di la oportunidad de intentarlo, en pocos días me llegó un mensaje donde me confirmaban que había aprobado”.

Y dice: “La emoción fue increíble. Luego, me incorporé a la Agencia de Modelaje "Deflores" donde recibí clases por unos meses (pasarela, actuación, maquillaje y baile urbano). También soy estudiante universitaria, mi especialidad es Licenciatura en Español Literatura. Me gusta mucho escuchar música, y por lo general lo hago en mis tiempos libres.

Su opinión sobre la industria

“Estuve por poco tiempo, y de la industria no me molesta nada, al contrario, conocí a excelentes personas”, contó.

También nos comentó que su belleza es pura herencia genética. “No tengo como tal ningún tipo de entrenamiento ni alimentación para mantenerme como dicen “diosa”, solo se trata de herencia genética supongo” (ríe).

La familia, un lugar importante donde descansar

Adriana cuenta lo mucho que le gusta el modelaje. “Mi sueño es continuar intentándolo y llegar hacer una excelente modelo. Y para lograrlo tengo lo más importante: el apoyo incondicional de amigos y familiares”, dice.

Por problemas de salud de su padre, quien enfermó gravemente por Dengue, Adriana no pudo completar su curso de Modelaje, pero ahora que el hombre se ha repuesto, espera poder retomar y seguir con lo que más la apasiona, modelar.

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