Entre los problemas señalados, Marte destacó el colapso del Metro de Santo Domingo, la postergación de la inauguración del Monorriel de Los Alcarrizos y el de Santiago, así como el funcionamiento del Teleférico. Además, denunció la persistencia del caos en el sistema de transporte, con importantes embotellamientos en la Capital, San Cristóbal, Moca, San Francisco de Macorís, Puerto Plata y Santiago, entre otras ciudades del interior del país.

Un punto central de su crítica fue la situación de aproximadamente 7,000 choferes de Santiago y la capital que, según Marte, llevan cuatro años esperando ser incorporados al nuevo modelo de transporte prometido. Estos choferes, afirma, solo confían en la palabra del presidente Luis Abinader, ya que se sienten defraudados por las autoridades del Intrant y otros funcionarios.

Marte también cuestionó la distribución y entrega de más de 10 mil millones de pesos en exenciones fiscales y tarjetas bonogas a algunos gremios del sector transporte, alegando que estos recursos no han beneficiado a los choferes ni a los usuarios debido a la falta de transparencia por parte de las autoridades.

Más allá del sector transporte, el presidente de la CNTT criticó los altos precios de productos básicos, medicamentos, servicios hospitalarios, combustibles, lubricantes y repuestos de vehículos, considerándolos inalcanzables para muchos dominicanos.

En relación al caso SENASA, que implica un presunto desfalco de más de 15 mil millones de pesos, Marte lo calificó como un hecho "inédito en materia de corrupción" y advirtió sobre la posible movilización de la sociedad civil para exigir justicia. Considera que este caso representa un "genocidio" al atentar contra la salud y la vida de más de dos millones de dominicanos.

Si bien reconoció algunos avances en el sistema de justicia, con apresamientos y extradiciones relacionados con el narcotráfico y las medidas cautelares impuestas a algunos implicados en el caso SENASA, Marte anticipa un 2026 "muy difícil" para el país. Considera que los problemas actuales continuarán agravándose, obstaculizando el desarrollo y la mejora de la calidad de vida de los dominicanos.